sábado, 11 de febrero de 2012

Whitney Houston - Live in California 1987


Homenaje a una víctima del show business.

Concierto completo, al comienzo de su carrera.
1 h 14 min.

Un excelente concierto del comienzo de la carrera de "star" de una joven cantante de gospel de 24 años, originaria de un barrio negro y humilde en la región de New York.





Uno de los aspectos interesantes es que parece estar grabado desde el público o algo así. Hay comentarios, exclamaciones, que no creo se hubieran registrado intencionalmente en una grabacióndes de la producción, a menos que esa haya sido la intención.

WH en ese concierto canta gospel en escenario. A un público entramado culturalmente en el gospel (este es un tema complejo, como lo muestro enseguida) lo debe conmover profundamente. WH, al principio, fue un caso evidente de expropiación corporativa de contenidos de cultura popular. Está la cuestión de dónde y cómo (en este caso, en las iglesias bautistas pobres y humildes del Gran New York, en las décadas posteriores a Martin Luther King y a la persecusión y derrota de los Black Panthers) se (re)construyeron esos contenidos de cultura popular.

También hay que mirarle la piel años más tarde (blanqueada artificialmente), el cuerpo (mantenido delgado artificialmente, obviamente con anfetaminas), un cuerpo que contrasta con la tardía Aretha Franklin, que engordó como cualquier cantante negra de blues / spiritual de décadas anteriores (ej., Bessie Smith, la de Saint Louis Blues tan criticada por Angela Davis.

Una aclaración. El gospel originariamente no es música de escenario. Es de iglesia (bautista) y de calle. Un extraordinario cantante callejero de gospel en el Harlem de los 50s. fue Rev (Reverendo, Pastor) Gary Davis Jr.

La Muerte no tiene ninguna clemencia  cantaba Davis, haciendo gospel (o sea, música/predicación) en las calles de Harlem, allá por las décadas de 1940-50.

Y, años después, en el programa de TV de Pete Seeger, el que había estado en las listas negras de McCarthy ("el Senador McCarthy, muerto en su cama de perros, flanqueado por cuatro buitres" le dedicó letanía el cubano Nicolás Guillén). Canta Oh Glory, How Happy I Am.

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